Hoy me he puesto romántico, me ha invadido el sentimiento totalmente y he recordado nuestro título de Liga alcanzado en Las Palmas, concretamente en El Estadio Insular, en 1983. Tuve la gran fortuna de vivir el partido en directo y un paseo con mi aita en la tarde de hoy me ha llenado de orgullo y por enésima vez voy a darle las gracias públicamente por la inmensa suerte que tuve.
Fuimos a Gran Canaria mi aita Joseba, mi primo Francis y un servidor que tenía ocho años,... pero que no olvidará jamás esa experiencia. Estuvimos en la grada de la montaña y cada vez que nuestro Athletic metía un gol (ganamos 1-5), mi aita nos agarraba y nos decía: "¡estén quietos coño, callados,.. que nos matan!". Nosotros lógicamente no le hacíamos caso y saltábamos siempre que nuestro bendito equipo rojiblanco anotaba un tanto. Al final, El Estadio Insular se convirtió en una fiesta del Athletic porque los aficionados a La U.D. Las Palmas, que había descendido, también aplaudían a nuestros futbolistas.
Y ese día por la mañana habíamos estado en El Hotel Santa Isabel de Playa de Las Canteras hablando con nuestro presidente Pedro Aurtenetxe, amigo de mi aita, que nos había invitado a la cena tras el partido si nos alzábamos con el título. Y lógicamente acudimos a la cita más contentos que unas castañuelas y aún recuerdo cómo subimos unas escaleras, encontramos a unas señoritas en la puerta de un salón, le preguntamos por el señor Aurtenetxe, salió el dueño de la empresa Aurman en Jardines de Albia en Bilbao, y nos dijo: "qué pasa txabales, pasen sin problemas y siéntense con nosotros". Entramos, nos acomodamos y tengo imágenes en mi retina que nunca olvidaré. Recuerdo a Manolo Sarabia comiendo en una mesa con dos personas mayores, no sé si eran sus padres; a Urtubi y compañía mosqueados porque El Estudio Estadio apenas nos había dedicado unos minutos,... y un servidor que pasado un tiempo juntó dos sillas y me quedé medio dormido... aunque por allí pasaban Andoni Zubizarreta y Andoni Cedrún, que parecían Romay, y me decían: "¡venga txabalote no te duermas!. Y mi aita, que es muy prudente y nunca quiere abusar de la confianza, se despidió de Pedro Aurtenetxe, le dimos infinitas gracias por dejarnos vivir algo único (porque nuestro Athletic es lo más grande que hay en el mundo) y nos fuimos... pero antes fue muy oportuno como siempre, habló con un fotógrafo, no pusimos al lado de nuestro presidente, mi estimado Javitxu Clemente, y un mito llamado Dani, y tengo la instántanea en un cuadro enorme que día tras día lo veo y me entran una ganas de llorar impresionante porque me rindo a la emoción.
Fuimos a Gran Canaria mi aita Joseba, mi primo Francis y un servidor que tenía ocho años,... pero que no olvidará jamás esa experiencia. Estuvimos en la grada de la montaña y cada vez que nuestro Athletic metía un gol (ganamos 1-5), mi aita nos agarraba y nos decía: "¡estén quietos coño, callados,.. que nos matan!". Nosotros lógicamente no le hacíamos caso y saltábamos siempre que nuestro bendito equipo rojiblanco anotaba un tanto. Al final, El Estadio Insular se convirtió en una fiesta del Athletic porque los aficionados a La U.D. Las Palmas, que había descendido, también aplaudían a nuestros futbolistas.
Y ese día por la mañana habíamos estado en El Hotel Santa Isabel de Playa de Las Canteras hablando con nuestro presidente Pedro Aurtenetxe, amigo de mi aita, que nos había invitado a la cena tras el partido si nos alzábamos con el título. Y lógicamente acudimos a la cita más contentos que unas castañuelas y aún recuerdo cómo subimos unas escaleras, encontramos a unas señoritas en la puerta de un salón, le preguntamos por el señor Aurtenetxe, salió el dueño de la empresa Aurman en Jardines de Albia en Bilbao, y nos dijo: "qué pasa txabales, pasen sin problemas y siéntense con nosotros". Entramos, nos acomodamos y tengo imágenes en mi retina que nunca olvidaré. Recuerdo a Manolo Sarabia comiendo en una mesa con dos personas mayores, no sé si eran sus padres; a Urtubi y compañía mosqueados porque El Estudio Estadio apenas nos había dedicado unos minutos,... y un servidor que pasado un tiempo juntó dos sillas y me quedé medio dormido... aunque por allí pasaban Andoni Zubizarreta y Andoni Cedrún, que parecían Romay, y me decían: "¡venga txabalote no te duermas!. Y mi aita, que es muy prudente y nunca quiere abusar de la confianza, se despidió de Pedro Aurtenetxe, le dimos infinitas gracias por dejarnos vivir algo único (porque nuestro Athletic es lo más grande que hay en el mundo) y nos fuimos... pero antes fue muy oportuno como siempre, habló con un fotógrafo, no pusimos al lado de nuestro presidente, mi estimado Javitxu Clemente, y un mito llamado Dani, y tengo la instántanea en un cuadro enorme que día tras día lo veo y me entran una ganas de llorar impresionante porque me rindo a la emoción.
Y luego el histórico recibimiento en toda Vizcaya del que otro mito, DON PIRU GAINZA, ya se anticipó en la isla al manifestar: "txabales no saben lo que les espera en Bilbao".
Y otro día les hablaré de La Final de Copa del cinco de mayo de 1984 conquistada en Madrid ante El Barca donde también estuve con mi aita en Chamartín. ¡AUPA ATHLETIC HASTA LA MUERTE!.
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