NO TENGO UNA BUENA CORAZONADA

Una doble sensación invade a mi hermosa cabeza. Y parece un contrasentido lo que voy a decir. Por una parte, creo que nuestros jugadores están pensando en las semifinales de Copa. Es ineludible. El partido de ida ante el Mirandés está a la vuelta de la esquina (próximo martes)... y nos jugamos mucho. Sin embargo, este Athletic ha sabido casi siempre cambiar el chip de una competición a otra. Y surje la pregunta: ¿por qué vamos a fallar en Vallecas? Pues no lo sé. No tengo una buena corazonada...
La cita de esta tarde en Madrid es importante. No se acaba el mundo si perdemos, pero la igualdad alumbra la parte intermedia de la tabla y si gana el Rayo se coloca a un punto. En cambio, si vencemos lo dejamos a siete.

Además, algunos ya están vendiendo el rollo de que en este campo es difícil hacer buen fútbol, que Llorente va a ser providencial (por lo visto los demás no juegan),... y tal y tal y tal. Excusitas por si nos volvemos de vacío a Bilbao o también un buen pretexto por si ganamos apurado... enaltecer ese triunfo. Como decimos en el Puerto de la Cruz, ¡¡Algunos saben más que diez!!

Y por cierto. Ni he escuchado ni he leído críticas a los penosos remates de cabeza de mi amigo Fernando Llorente el otro día en Mallorca. Tuvo ocasiones diáfanas con la testa... que remató fatal. Me gusta el talante de nuestro presidente Josu Urrutia. Creo que está esperando a ver si realmente Gary Cooper quiere continuar en el Athletic para alcanzar la renovación.

Pues lo dicho. La corazonada no es buena. Ojalá me equivoque y disfrutemos con una victoria que nos puede meter en puestos europeos nuevamente. ¡¡¡ AUPA ATHLETIC HASTA EL INFINITO!!!