Cuando empiezo a escribir este artículo son las 6.30 de la mañana de hoy viernes. Hace apenas ocho horas que ha terminado el partido Schalke 2-Athletic 4 y no he podido conciliar el sueño. Vuelta pa acá, vuelta pa allá. Fue tanta la emoción y la alegría que anoche estaba metido en twitter y de repente de lo nervioso que me puse apagué el ordenador y me pegué un rato para encenderlo porque parecía que me iba a dar un yuyu. Me quedé totalmente en blanco de la tremenda felicidad que me embargaba ¡¡¡¡Bendito Athletic... Dioossssssssssssss!!!!
Nueva victoria europea en el momento más inesperado. Perdíamos 2-1 y el mejor equipo del mundo sacó toda su raza, su casta... y su calidad para realizar un tramo final de partido de ensueño. Cuando daba la sensación de que nos traeríamos un 2-1 para San Mamés, el Athletic dijo "aquí estoy yo", e hizo unos veinte minutos de infarto desarbolando a un rival que no se creía lo que veía. Tres goles que elevan a los pupilos de Bielsa al Olimpo y nos colocan en las semifinales de La Europa League. Sí, el Athletic está a un paso de una final que se mereció ganar en 1977 y que me juego lo que quieran tendrá una nueva oportunidad de luchar por un título continental.
Primero fue lo sucedido ante el Manchester con una eliminatoria sencillamente genial. Y ahora el Schalke. En este torneo el Athletic se está comportando como un equipo grande, enorme, gigantesco... Tras dos goles de Raúl en dos fallos defensivos clamorosos y una línea de irregularidad evidente (aunque los alemanes tampoco hicieron el partido del siglo) el Athletic decidió con justicia en un abrir y cerrar de ojos. Marcar tres goles en veinte minutos no es fruto de la casualidad. Se debe al trabajo y a las tremendas ganas que existen por hacer algo grande en Europa. No es fácil hacer lo que hizo el mejor equipo del mundo... y más en terreno alemán. Tiene un mérito de dimensiones incalculables. Y por eso hay que resaltarlo en su justa medida. El Athletic dejó su estela y nos transmitió una felicidad que es difícil de explicar con palabras. No se preocupen queridos amigos porque estamos en semifinales y el choque de la próxima semana en La Catedral se convertirá en una auténtica fiesta. Bilbao, Vizcaya entera, todos los rincones del mundo donde hay aficionados al Athletic (yo conozco uno, el Puerto de la Cruz, donde más de un amigo estará disfrutando de lo lindo) vivirán el pase a las semifinales sin problema alguno.
Y lógicamente iba a pasar por un tubo de una situación vergonzosa, deleznable... que se dio anoche en la retransmisión del partido en Tele 5, pero no puedo porque fue descarado y bochornoso. A los señores Manu Carreño y Juanma Castaño se les vio el plumero con Raúl... desde Tenerife. Estaba jugando el Athletic y sufrieron una bajada de pantalones con el exdelantero del Madrid espectacular... sobre todo el segundo que es un pelota y un alcahuete y que se arrima al árbol que más le interesa. Al final, le hacía la rosca a Fernando Llorente... pero el individuo seguía erre que erre con Raúl. Como decimos en el Puerto de la Cruz ¡¡¡Vétete por ahí señor Carreño y Vétete por ahí señor Castaño!!! El segundo es un falso.
En fin, ¡¡¡¡Gora Athletic, Gora Euskadi y Gora la madre que me parió!!!! ¡¡¡¡ Esto es lo más grande que hay en el mundo!!!! ¡¡¡¡Aupa Athletic hasta el infinito!!! Y por supuesto Eskerrik asko aitatxu por convertirme en rojiblanco de San Mamés de txikia. Te quiero con locura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario