Hace justo 30 años, el 1 de mayo de 1983, el Athletic estaba celebrando en el Hotel Reina Isabel de Playa de Las Canteras la conquista de su séptimo título liguero. El partido ante la U.D. Las Palmas comenzó a las 16:30 hora canaria. Y el conjunto rojiblanco se impuso 1-5 con dos goles de Sarabia, Dani, Argote y Urtubi. Este triunfo unido a la victoria del Valencia frente al Madrid propició que la gloria volase a nuestro querido Botxo. Esa tarde grancanaria formaron en El Estadio Insular, Zubizarreta, Urkiaga, Liceranzu, Nuñez, De La Fuente, Sola, De Andrés, Urtubi, Dani, Sarabia y Argote. También jugaron, Noriega y Julio Salinas.
Algunos integrantes del Athletic Txapeldun de Javier Clemente recuerdan esos momentos de alegría y felicidad.
ANDONI GOIKOETXEA
Por supuesto, son recuerdos inolvidables. Fue la primera liga y no estaba en nuestras manos. Teníamos que ganar sí o sí. Pero sí el R. Madrid ganaba en Valencia no teníamos nada que hacer. Perdió y nosotros ganamos 1-5. Fue apoteósico. El partido lo vi desde la grada porque estaba sancionado por tarjetas.
La noche en Las Palmas, el viaje, el recibimiento, LA GABARRA... En fin, fue lo más grande para cualquier futbolista del Athletic. Y yo tuve la gran fortuna de vivir emociones que no se pueden expresar con palabras. AUPA ATHLETIC desde Malabo.
LUIS DE LA FUENTE
La verdad es que uno siente una emoción y una alegría que es difícil de describir. Al ser el primer título uno cree haber tocado el cielo. Ser campeón en el Athletic es difícilmente igualable en otro equipo por la trascendencia que tiene el club en la sociedad. Yo sentí una felicidad plena. Y la celebración en Las Palmas fue apoteósica. Disfrutamos muchísimo, pero todos estábamos deseando regresar a casa para disfrutar junto a nuestras familias y amigos. Algo inenarrable por la cantidad de emociones y sentimientos que a uno se le pasan por la cabeza.
En Las Palmas ganamos 1-5 y lo que nadie esperaba sucedió en Valencia que contra todo pronóstico el Real Madrid perdió 1-0. Lo que más recuerdo es la espera que tuvimos en el mismo campo porque en Valencia el partido finalizó tres o cuatro minutos más tarde, pero al final pudimos cantar el alirón y entre abrazos, júbilo y también alguna que otra lágrima entramos en el vestuario donde reinaba un gran ambiente. En aquel momento no éramos conscientes de lo que habíamos logrado. Me acuerdo que metí el cuarto gol y los demás me parece que Dani, Sarabia dos e Isma Urtubi. Lo de La Gabarra fue una cosa que nunca me podía imaginar, que hubiera tanta gente en un recorrido que miraras donde miraras sólo se veía gente y más gente vestidos de zurigorri. Y aunque tras tantos días de actos que tuvimos el cansancio hizo acto de presencia, mereció la pena festejar en compañía de toda la afición del Athetic. Como anécdota recuerdo que después de comer en Las Arenas, nos disponíamos a subir a La Gabarra y Agustín Gisasola se cayó al agua (parece que iba hablando con otra persona y no se dio cuenta que había un espacio entre el muelle y La Gabarra). Menos mal que no fue nada grave porque se podía haber hecho una avería.
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