Anoche vi el partido en un bar en Barakaldo y fue tanta la alegría y felicidad que sentí que "incité" a las masas. Terminó el partido ante el Sporting, grité de lo lindo Athletic, le di un beso y un abrazo inmenso a mi mujer Zuriñe y a mi cuñada Saray y empecé: ¡¡¡Athleeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeetic!!!.... y contestaron mis paisanos: ¡¡¡Riau!!!. Seguimos: ¡¡¡Athleeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeetic!!!... y contestaron mis paisanos: ¡¡¡Riau!!! Y continuamos: ¡¡¡Athleeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeetic!!!... y contestaron mis paisanos: ¡¡¡Riau!!!. Y luego seguimos todos: ¡¡¡Alavín, Alaván, Alavín bom bam, Athletic, Athletic, geuria!!!... Aquello fue el no va más. Incluso durante el transcurso del encuentro, había un colegilla a mi lado al que no conocía de nada... y en uno de nuestros goles nos dimos un abrazo del copón.
Fue sencillamente genial, apoteósico, inolvidable, fantástico... Fue tanta la emoción que hasta José Angel Iríbar El Txopo estaba con los ojos medio llorosos cuando Canal Plus lo entrevistaba en el palco de San Mamés al final del choque.
El Athletic se ha plantado en dos finales y la posibilidad de lograr un título y volver a sacar La Gabarra está muy cerca. Si en el año 84 cuando ganamos el doblete calcularon que salieron a la calle en Bilbao un millón de personas a celebrarlo, no me quiero ni imaginar si cae La Copa o La Europa League... ¡o si conseguimos ambos trofeos! Es probable que Bilbao se quede pequeño...
Lo de ayer en San Mamés fue frenético. Tenía plena seguridad de que el Athletic jugaría la Final. Ya lo había anunciado en esta página. En lo que me equivoqué fue en que sería más fácil de lo previsto. Afilamos las garras, pero enfrente había un equipo que tenía cinco carreras universitarias, cinco másters y cinco doctorados obtenidos con matrícula de honor. No se rindieron y en el último suspiro un gol de Fernando Llorente nos catapultó al éxtasis más absoluto.
Un Llorente que si como cabeceador tiene muchas penurias, su capacidad técnica con los pies y con el pecho se va disparando hasta límites insospechados.
Estamos en la Final y la ilusión es ganarla. Mi corazón evidentemente dice que nos llevaremos el triunfo. Sin embargo, mi cabeza indica que cualquier fallo te deja K.O. aunque lo bueno que tiene este Athletic es que en las situaciones más adversas es capaz de levantar un resultado negativo.
Tal y como hice en 2009 antes de jugar la Final de Copa ante el Barca voy a ir a una tienda que hay en el callejoncito enfrente del escudo de San Mamés a comprar las réplicas de la Copa y de la Europa League que me imagino que las tendrán a la venta.
¡¡¡Dios sólo creó un equipo único, EL ATHLETIC!!! ¡¡¡Con cantera y afición no hace falta importación!!!
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