LA FAMILIA ROJIBLANCA OPINA DE FERNANDO LLORENTE ( I )

I)- ¿Fernando Llorente debe jugar o debe pasar un año en la grada?


II)- ¿Por qué el delantero aún no se ha manifestado?


III)- ¿Si Llorente se va sin dejar un euro en las arcas de Ibaigane será un fracaso de La Junta Directiva liderada por Josu Urrutia?

                                 (ANDONI GOIKOETXEA, EX JUGADOR INTERNACIONAL)


I)- Debe jugar por varios motivos: 1)- Porque es jugador del Athletic. 2)- Porque es un gran jugador internacional, Campeón del Mundo y de Europa. 3)-  El Athletic le paga religiosamente todos los meses. 4)- Como profesional dará como siempre lo mejor de si mismo excepto en el caso que desde la grada reciba mal trato y no pueda rendir debido a la presión.
 
II)- Probablemente no se haya manifestado porque se sienta en una encrucijada entre sus deseos de desarrollarse como profesional y lo que se espera de él desde el Athletic. No obstante, creo que haga lo que haga ya se le ha juzgado, por lo que recibirá críticas negativas ante cualquier manifestación. En definitiva, una situación muy difícil.

III)- Sin ningún tipo de duda, porque si has perdido el activo deportivo en ningún caso debes perder el activo económico.

                                       (JON LAUCIRICA, PERIODISTA DE CANAL PLUS)


I)- Debe jugar porque ahora mismo es un jugador más de la plantilla rojiblanca. El Athletic no se puede permitir el lujo de tener un futbolista así todos los domingos en la grada.
 
II)- Porque su entorno le habrá recomendado no hacerlo para no echar más leña al fuego. Pero seguro que hablará.

III)- Por supuesto que no es un fracaso. La Junta lo ha dado todo para renovar a un jugador estratégico y no ha podido, todavía.

                                              (JON GOIKOETXEA, PERIODISTA DE DEIA)


I)- Fernando Llorente sigue siendo jugador del Athletic a día de hoy y un jugador extraordinario. Obligarle a estar un año en la grada - si no hay ninguna otra posibilidad de acuerdo, ni con él ni con otro club para su traspaso - no sería más que un "castigo" por su deseo de marchar. Un castigo que perjudicaría al jugador, sin duda - se desvalorizaría -, pero que tampoco haría ningún bien al Athletic, ni ambiental ni futbolísticamente. La cuestión, en todo caso, es su disponibilidad real para cumplir el año de contrato que le queda, su implicación para ello, y no en menor medida gestionar el ambiente que - especialmente en San Mamés - tendría en su contra por parte de una parte de la grada. Demasiados factores.

La última rueda de prensa del presidente Urrutia apuntaba hacia trabajar en la línea de recuperar la participación de Llorente, e incluso poder convencerle de que se quedara. Tratándose de un recurso futbolístico del club, es lo más lógico.

De lo que no soy partidario, en ningún caso, es del empleo de conceptos como "mercenario", del insulto, de los exégetas de la "pureza" rojiblanca - como si el resto no abonáramos nuestro carnet de socio, al parecer - y del enrarecimiento innecesario del ambiente en San Mamés.

II)- Resulta imposible saber con certeza qué movimientos ha habido en estas semanas de verano tan enrarecidas con los episodios de Bielsa, Javi Martínez y Llorente, pero creo que puede concluirse que la posición negociadora de Llorente - o del equipo que le asesore - no ha sido muy hábil. Si consideraba que sólo por decir que no quería seguir en el Athletic el club se avendría a negociar, midió mal. Y para negociar en ventaja hay que saber medir. Si no tenía, además, una oferta suficientemente sustanciosa detrás, aún midió peor. Con todo ello, no tiene fácil manifestarse públicamente. Más que nada porque probablemente no tenga del todo claro qué hacer. Y entiendo que no querrá volver a hablar hasta que no lo vea definitivamente claro.

III)- Será un fracaso; pero no porque el Athletic no ingrese un euro. Lo mismo que en el caso de Javi Martínez. Será un fracaso porque el club no habrá conseguido retener a sus dos jugadores más talentosos tras la mejor temporada del club en el escenario moderno del fútbol posterior a la ley Bosman. Tras jugar dos finales. Si el club lo que pretendía era que se quedaran, estrictamente, el fracaso no es no ingresar dinero: es no haberlo conseguido. Lo que conecta este principio de temporada con un tema esencial en la definición del listón deportivo del Athletic, a saber: la gestión del talento - qué hacer cuando uno o varios jugadores destacan - y el alcance del atractivo del proyecto deportivo del Athletic.