Partiendo de la base de que hasta el rabo todo es toro, que hay que tener los ojos bien abiertos, que la concentración debe ser máxima para evitar una sorpresa, que hay que plantear el choque de San Mamés con la misma seriedad que lo hicimos en Miranda, que debemos evitar las confianzas... creo que nuestro Athletic está tocando con las manos la segunda final de Copa en los últimos cuatro años.
Con el bendito amparo del público de La Catedral el sueño se debe cumplir. Y hay un dato que indica que el conjunto rojiblanco lo tiene casi hecho. Si el Mirandés quiere pasar debe meter mínimo dos goles... y nosotros quedarnos a cero, algo que no es imposible evidentemente... pero francamente complicado. Es parecido a lo sucedido en la reciente visita que hicimos al Bernabéu. Muchos hablaban de que Iraizoz podía superar el récord de Zubizarreta... y yo callado la boca alucinaba ¿Por qué? Pues simple y llanamente porque cuando acudes a Chamartín, el Madrid te mete un gol en el 95% de los casos... en los primeros treinta minutos o un poquito más tarde. Pues ahora se puede repetir la coyuntura. No creo que nos quedemos a cero y desde que metamos un gol, al equipo de Pouso el partido se le pondrá tan empinado como subir el Teide.
Lógicamente, esta reflexión es sobre el tapete ¿Qué se puede precipitar al vacío? Evidentemente que sí. Sin embargo, el Athletic va a llegar a la Final de Copa. San Mamés será una fiesta y el rugido del león se va a escuchar en toda Euskadi.
Del partido de ayer en Anduva hay que rescatar varias cositas. Por una parte, los dos golazos de Fernando Llorente. El primero tras un jugadón de Oscar De Marcos por banda izquierda que envía un centro templado maravilloso y el delantero de Rincón de Soto remata como un auténtico depredador del área. Si en otras ocasiones hemos criticado que Llorente remata al muñeco (el portero), en esta oportunidad envió la pelota justo al ladito del poste donde no llegaba el canario Nauzet. Y en el segundo tanto se deshace de cuantos rivales le salen al paso en el borde del área, se revuelve a la perfección y la enchufa. Y por cierto, amigo Del Bosque, espero que convoque pronto a un portento llamado Oscar De Marcos. Lo pudo ver en directo ayer en Anduva y una vez más nuestro futbolista estuvo inmenso.
En fin, sin lanzar las campanas al vuelo, hay que preparar una previa idéntica a la vivida en 2009 ante el Sevilla. Todos tenemos el corazón lleno de emociones fuertes y se tienen que cumplir ¡¡¡AUPA ATHLETIC HASTA EL INFINITO!!!
P.D: En la foto, nuestro mito y ex capitán Dani recogiendo la Copa que le ganamos al Barcelona en 1984 en el Santiago Bernabéu.
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