ANDONI CEDRUN. Fue suplente de Zubizarreta ese curso 82-83... pero igual de Campeón que el resto de compañeros.
¿Cómo transcurrió la antesala a la cita en el Estadio Insular?
La semana previa fue como siempre, entrenando con una gran tranquilidad, no había mucho nerviosismo porque sí, podíamos ser Campeones de Liga, pero pensábamos que el Real Madrid no iba a perder en Mestalla, incluso creo que le valía el empate.
Y llegó el partido ante la U.D con un ojo puesto en Valencia
Fuimos a Las Palmas con la intención de ganar y a ver si surgía la carambola. Recuerdo que fueron nuestras novias o mujeres, fue un premio del Athletic a nuestros familiares en Canarias, un sitio bueno para pasar el fin de semana. El partido empezó con mucho calor, campo sequísimo y tuvimos la desgracia de meter el 1-0 en propia puerta. El equipo reaccionó, el segundo gol hizo mucho daño a la U.D, ellos empezaron a tener mucha ansiedad y el segundo tiempo fue un desfile militar ganando 1-5.
Estabas en el banquillo donde se vivieron cinco minutos de mucha tensión
Nos estaban informando del resultado del Valencia-Madrid, nosotros acabamos antes y cuando nos dijeron que terminó el choque de Mestalla fue una alegría tremenda.
La primera celebración en tierras grancanarias fue potente
La noche fue magnífica, una cena por todo lo alto, luego nos bañamos en La Playa de Las Canteras, nos dormimos...
Al día siguiente marchamos para Bilbao
Haciendo una parada previa en Madrid esperando la organización de La Gabarra. En Madrid, tuvimos una juerga buena porque fuimos a una discoteca. Allí había algún merengue que le dijo algún comentario a Goikoetxea o Liceranzu, no recuerdo bien, pero no pasó nada. Disfrutamos muchísimo y al día siguiente la gran fiesta en Bilbao.
Lo de La Gabarra fue...
Tremendo. Ver desde Las Arenas hasta el Ayuntamiento de Bilbao a tanta gente... ahí están las imágenes. Me quedé alucinado. En Los Altos Hornos, había gente colgada en las grúas jugándose la vida. Todo el pueblo vasco, especialmente el vizcaíno, estaba disfrutando. Fue una gran fiesta, muy bonita, muy bonita.
Y Agustín Guisasola tuvo un pequeño despiste y se dio un baño en La Ría
No lo puedo olvidar. Estábamos embarcando en La Gabarra, Guisasola se tropezó y cayó al agua. Estuvo a punto de ser presionado con el muelle, pero gracias a Dios no pasó nada. Al final, fue un remojón.
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