¡Felices! Así es como nos sentimos los seguidores del Athletic tras ver ayer la semifinal de Copa contra el C.D. Mirandés en La Catedral.
Antes de nada me gustaría agradecer tanto a los jugadores del equipo burgalés como a su técnico y Presidente el encuentro: serio, respetuoso y sobre todo con su orgullo. Fue un placer tener como rival de altura un 2ª B crecido, con casta y que supo poner al Athletic a trabajar desde el primer minuto del partido. Para ellos mi más sentido respeto y admiración. Espero que en la Liga les vaya estupendamente y consigan una plaza para la División de Plata.
Y en lo que se refiere a los nuestros: felicidad y orgullo. Estos son los grandes momentos de la historia de nuestro equipo que una se siente orgullosa de vivir. Fue un partido intenso, en el que el Athletic no dio tregua durante la primera parte a los mirandeses. El tercer gol rojiblanco dejó a los de Pouso durante unos momentos fuera de juego, pero aún así ellos no dieron por perdido el partido y consiguieron dos goles en la segunda mitad. Lucharon con casta y eso hizo que se fueran ovacionados de San Mamés. La parroquia rojiblanca es sabia. No hay discusión.
Fue una gran fiesta para la afición de La Catedral, que no quiso perderse la cita bajo ningún concepto. No se sintió frío sino que las más de 40.000 gargantas no pararon de animar y hacer sentir a los jugadores el apoyo de todos los rojiblancos, el ánimo y la creencia de que íbamos a ir a la Final de Copa por segunda vez en los últimos cuatro años.Todavía quedan tres meses para ese partido, tenemos tiempo para prepararnos, disfrutar y seguir sintiéndonos orgullosos de ser rojiblancos, de ser de San Mamés, de jugar en La Catedral.
Seguro que este año va a ser diferente, vamos a ganar La Copa del Rey en Madrid y sacaremos la Gabarra. Mi familia, mi niña Nagore, que nacerá en abril, y yo, viviremos ese momento con orgullo, admiración y la mayor de las emociones.
¡Aupa Athletic! ...danontzat zara zu geuria...
Artículo de ZURIÑE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario