Sí, nuestro Athletic alcanzó en Vigo una victoria de prestigio. Porque ganar en Balaídos siempre implica una dificultad máxima... y más en la actualidad donde el conjunto gallego está ubicado en puestos Champions muy cerquita de Barca y Atlético, primero y segundo (hasta ayer la diferencia era sólo de cuatro puntos) Por eso, debemos otorgar el enorme mérito que conlleva al grupo de Valverde. Y ya me pueden contar milongas; en el fútbol es primordial no encajar. Si no te meten, tienes mucho terreno ganado. Ahí está el ejemplo de los dos últimos partidos de nuestro Athletic: tres goles a favor, cero en contra... igual a seis puntos. Y en las últimas cinco jornadas de Liga sólo hemos encajado un tanto, ante el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón. Además, el chicharrito de Raúl García (tras mágica asistencia de Aduriz) sigue dejando en evidencia a aquellos que dudaban de su entrega por nuestros benditos colores. El navarrico es un jugador top (como diría mi amigo Sergio Corino). Un profesional como la copa de un pino totalmente implicado por la causa rojiblanca. Es un león de pies a cabeza. Lo está demostrando partido tras partido... y aún nos queda por ver su mejor versión.
En fin, me quedo con unas palabras de Valverde al finalizar el partido en Balaídos. "Son tres puntos vitales. Era muy importante que el Celta no se escapase". Ahora, este domingo, debemos superar a una U.D Las Palmas que siempre nos trae gratísimos recuerdos. ¿Se acuerdan cuando nos proclamamos campeones de Liga en el Estadio Insular en 1983? Fue apoteósico, grandioso, inolvidable... Tuve la inmensa fortuna de vivir ese título en directo. Primero en las gradas del recinto amarillo y más tarde en el Hotel Reina Isabel con toda la familia Athletic. Algún día se repetirá. ¡¡¡Aupa Athletic hasta el infinito!!!
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