¡¡¡Qué tres puntazos!!! Sin brillantez, sin buen juego... me importa un comino. Lo importante es que el Athletic ganó en el momento más oportuno. Una derrota hubiese creado infinidad de problemas. Los tres puntos nos permiten respirar... sin confianzas. Me aferro a las palabras de Aduriz. Ha afirmado el delantero guipuzcoano que "tranquilidad nada, la situación es aún muy delicada". Sabio y certero Aduriz, no sólo en el césped donde los números se decantan totalmente a su favor y en beneficio de la junta presidida por Josu Urrutia que se marcó el objetivo de recuperar sus servicios cuando algunos -- entre ellos un servidor -- desconfiábamos de lo que podía ofrecer tras cuatro años notables en Mallorca y Valencia. Lleva diez goles -- ocho en Liga y dos en Europa -- y a este ritmo no es de locos vaticinar que puede alcanzar los 30 chicharritos. Pero lo dicho. Me encanta el papel que está tomando Aduriz fuera del terreno de juego. La veteranía es un grado y tiene que exprimirla al máximo por el bien del Athletic.
Sevilla. Si ganamos al conjunto hispalense, el futuro se verá de una manera totalmente diferente y si ganamos al Lyon este jueves y seguimos teniendo opciones europeas... pues ni te cuento. Sin embargo, no es bueno hacer cábalas de antemano porque luego llegan las lágrimas. También pensábamos que el partido ante el Getafe sería un punto de inflexión y mejor no recordar lo que pasó... El Sevilla siempre ha creado nervios en La Catedral. Hemos encajado más de una goleada en los últimos diez años y por lo tanto debemos salir concentraditos y muy serios si queremos vencer. Y sigo aferrado a mi argumento ¿Tirar la Copa porque tenemos que pensar en la liga? No estoy de acuerdo. Mínimo hay que pasar la eliminatoria frente al Eibar, sino será un batacazo de padre y muy señor mío.
Yo quiero un cambio en la portería del Athletic ya. Gorka Iraizoz se volvió a comer con papas arrugadas y mojo picón otro gol en Granada. Y no me vale que alterne grandes aciertos con grandes errores. Yo quiero un portero bueno... y regular. Y lo tenemos. Se llama Raúl. Está preparado. Lo ha demostrado en los pocos partidos que ha jugado. Se acabaron las concesiones señor Bielsa.
Además, el guardameta rojiblanco protagonizó una escena surrealista en Los Cármenes. Llegó tarde al inicio del segundo tiempo. Sí, el colegiado había dado el pitido inicial y Gorka salió rápidamente desde la banda hacia su portería con el balón en juego. Realmente de chiste.
Primero error garrafal de Iraizoz. Segundo, fallo clamoroso del colegiado y lo más importante ¡¡cómo coño no nos damos cuenta que nos falta el señor que tiene que amparar nuestros tres palos!! ¡¡Que me lo expliquen porque yo no lo entiendo!! ¡¡Estábamos pensando en pajaritos preñados tanto los jugadores como los integrantes del banquillo!! ¡¡Fue una pifia monumental!! Vamos a ver porque insisto, no comulgo con esta coyuntura ¿Los defensas no fueron capaces de ver que detrás suyo no estaba el portero? ¿En qué carajo estaban pensando? Me subo por las paredes. Pudimos haber encajado el gol más tonto de la historia del fútbol mundial.
Como le dije esta mañana por teléfono a un buen amigo de Bilbao: "Qué felicidad tengo. Los lunes son muy diferentes si el Athletic ha cosechado una victoria".
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