JOSEBA AGUIRRE. Estaba destinado a marcar una época en el centro del campo del ATHLETIC. Sin embargo, una fea entrada que sufrió en Grecia (ante el AEK en Uefa) le privó de disfrutar de una amplia trayectoria en Bilbao. Por el camino, dejó auténticos golazos. Por ejemplo, uno ante el Barcelona que originó la locura total entre el aficionado rojiblanco.
Temporada 87-88. Menudo ambiente se vivió en San Mamés con la visita del Barca.
Siempre que se recibía al Real Madrid o Barcelona en San Mamés, el ambiente que se respiraba era inigualable. El público estaba entregado y desde luego que era un jugador más.
Minuto dos. Un señor de Ortuella que se llama Joseba Aguirre anotó un golazo.
Mi aita siempre me recordaba que para qué metí el gol tan pronto. No le dio tiempo a sentarse y no lo pudo ver en directo. Hubiese sido mejor meterlo en el 90 porque estuvimos 88 minutos sufriendo.
Pareces una persona muy tranquila. Sin embargo, en aquel momento sufres una transformación.
Conseguir el gol de la victoria ante todo un Barcelona es un subidón y sobre todo poder sentir desde tan cerca las sensaciones de la afición.
Y también participas activamente en la conquista de ese mismo año en el Nou Camp por 1-2.
La noche anterior tuvimos que abandonar un rato el hotel sobre las dos de la madrugada porque se generó un pequeño incendio y se dispararon la alarmas, pero eso no nos afectó para poder conseguir el triunfo.
Vamos al momento presente. ¿Nos quitamos una losa de encima con el triunfo en Levante?
Fue muy importante porque el equipo estaba un tanto presionado por la marcha liguera y la victoria fue un paso adelante sobre todo después del triunfo en Copa ante el Málaga.
Sin embargo, este domingo se presenta el Barcelona en La Catedral. ¿Existen opciones reales de ganar?
Después de la victoria ante el Levante, seguro que los jugadores afrontan este partido sin tantas urgencias. Desde luego, tenemos más posibilidades de ganar tras el triunfo en Levante que si hubiésemos perdido porque la cabeza juega un papel importante en esto del fútbol.
¿Por qué el Athletic vive al filo del alambre liguero en el presente curso?
Es un equipo que cuando va bien tiene unos jugadores que se atreven a hacer muchas cosas, arriesgan. Y sin embargo, cuando no salen los resultados, el equipo no hace cosas por miedo a fallar.
¿Los jugadores están sumidos en un estado de tensión, ansiedad y nerviosismo? ¿Pesa el escudo?
Lo que pesa es que hay un amor a los colores que cuando ves que no salen las cosas hay mucha gente que sufre por ello y la responsabilidad pesa.
¿El discurso de Valverde se ha agotado?
Valverde es el entrenador adecuado.
Un pilar importante en el mediocampo rojiblanco es Iturraspe. ¿Qué le sucede al futbolista nacido en Abadiño? ¿Los fallos que ha cometido son fruto de que el míster demanda riesgo o siempre decide el jugador en último instante?
Insisto. La cabeza juega un papel importante en el futbol y cuando estás de que sí, te sale todo, y cuando estás de que no, te sale todo al revés. Prueba de ello, en el último partido Iturraspe se ha lesionado y es baja para un mes.
Nuestra defensa se asemeja a un flan de huevo...
El Athletic es un equipo que aprieta mucho arriba y cuando no se está bien se nota. La defensa empieza arriba y cuando existen desajustes el contrario comienza a llegar con facilidad. Además, hay que añadir que hemos tenido auténtica mala fortuna en algunos goles encajados.
Empezamos a hacer un monumento de Aduriz al lado de Pichichi...
Está siendo un jugador importantísimo en el juego ofensivo del equipo. Faltan los goles de Susaeta, De Marcos, Muniain y Rico que el año pasado estuvieron más acertados en esa faceta del juego.
¿La Copa puede deparar una alegría o no hay que lanzar las campanas al vuelo y preparar las semifinales ante el Espanyol con mucha concentración?
La Copa es una buena oportunidad para volver a Europa, pero hay mucha igualdad y será difícil.
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