A los fascistas asquerosos que volvieron a insultar a Carlos Gurpegui habría que meterlos en el talego cada vez que se disputa un partido de fútbol. O mejor dicho, habría que meterlos en el talego de por vida. Produce naúseas escuchar estos insultos a un jugador ejemplar. Y genera cachondeo que algún prepotente que milita en un equipo madrileño se queje como una nenaza cuando lo vejan. Entonces, ¿qué debería hacer Gurpegui?.
Al señor colegiado le faltaron dos bemoles para expulsar a un hediondo llamado Diego Costa. Cuando ya tenía una amarilla realizó más de una entrada fea con agresión incluída y se tiró dentro del área intentando simular un penalti (el trencilla le pitó falta en contra), pero no le mostró la tarjeta que debía enviarlo a la caseta. En cambio, Aduriz fue amonestado a la primeras de cambio. Sencillamente vergonzoso.
El Athletic fue incapaz de meter un gol cuando más cerca lo tuvo, es decir, en la primera media hora. Echó por la borda una ocasión de oro y claro, sabíamos que el Atlético no iba a perdonar. En el segundo acto nos salimos del guión y sin pasar grandes apuros, lo mejor fue que no consiguieron el segundo tanto que hubiese dejado la eliminatoria cuesta arriba.
El gol encajado fue otro error de patio de colegio. Un oponente no puede rematar a tres metros del portero... solo. Fue un regalo. Faltó intensidad y concentración.
Creo en la remontada. Lógicamente, la empresa reviste dificultad. Sin embargo, nos plantaremos en semifinales. El Atlético sufrirá en San Mamés y cederá ante un Athletic que se empleará a fondo y dejará otra jornada de gloria entre sus aficionados. Lo digo plenamente convencido. ¡¡¡Vamos a eliminar al conjunto de Simeone!!!.
El Athletic fue incapaz de meter un gol cuando más cerca lo tuvo, es decir, en la primera media hora. Echó por la borda una ocasión de oro y claro, sabíamos que el Atlético no iba a perdonar. En el segundo acto nos salimos del guión y sin pasar grandes apuros, lo mejor fue que no consiguieron el segundo tanto que hubiese dejado la eliminatoria cuesta arriba.
El gol encajado fue otro error de patio de colegio. Un oponente no puede rematar a tres metros del portero... solo. Fue un regalo. Faltó intensidad y concentración.
Creo en la remontada. Lógicamente, la empresa reviste dificultad. Sin embargo, nos plantaremos en semifinales. El Atlético sufrirá en San Mamés y cederá ante un Athletic que se empleará a fondo y dejará otra jornada de gloria entre sus aficionados. Lo digo plenamente convencido. ¡¡¡Vamos a eliminar al conjunto de Simeone!!!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario