Pueden extraer la conclusión que crean oportuna. La libertad es inherente al ser humano. Lo dejé claro hace algunos días. Marcelo Bielsa ha llevado a cabo un trabajo excepcional en su estreno en el Athletic. Con divergencias o sin ellas, sus números son innegables. Nos hemos plantado en una final europea por segunda vez en nuestra centenaria historia y estamos en el partido decisivo de la Copa del Rey. Además, han quedado para la posteridad noches inolvidables (por ejemplo, el partido ante el Manchester) y muchos jugadores han sufrido un crecimiento espectacular. Hasta este punto, creo que estamos todos de acuerdo.
Ahora bien, hay que saber diferenciar distintos aspectos. Lo dicho no está reñido con la posibilidad de que nos quedemos con la miel en los labios -- esperemos evidentemente que no, sobra decirlo -- y nos invada un cierto aire de desilusión. Y no confundan. No estoy hablando de decepción ni de fracaso... ¡ni muchísimo menos! Me refiero a que hemos tenido en la mano dos títulos y se puede dar el hecho de que se nos escapen. Y claro que todos firmamos llegar cada temporada a estos límites tan esplendorosos y sencillamente geniales. Pero tal y como dijo en esta página hace algunos meses Ismael Urtubi, pieza indiscutible del Athletic Txapeldun de los años 80, "No basta con llegar, hay que ganar la final".
Y lo que me ha llamado poderosamente la atención es que se ha pasado de puntillas por el choque de La Europa League ante el Atlético de Madrid. Respetando opiniones que apelan a nuestra inexperiencia ante lo vaqueteados que estaban los pupilos de Simeone en estas lides, creo que Marcelo Bielsa fracasó estrepitosamente en su planteamiento. Ciñéndome a un titular que nos dejó una entrevista en este humilde blog con el director adjunto de El País, Juan Cruz, "Simeone planteó el partido, Bielsa lo dejó al garete". Estoy plenamente de acuerdo. O para ser más exactos, Bielsa no supo equilibrar la balanza de lo ofrecido por su compatriota. Y no deben doler prendas en reconocerlo. Parece que si haces esta afirmación estás dejando en evidencia el tremendo trabajo del inquilino del banquillo de San Mamés. Pues para nada. Bielsa ha hecho una excelente labor... no sabiendo dar con la tecla a la hora de conquistar el título. Echo en falta críticas al técnico argentino desde algunas tribunas que se distinguen más por magnificar cuestiones estilo "Bielsa sacó al campo one, two.... o sixty-one de Lezama a un niño a ver la sesión del Athletic" que por decir verdades como puños. Parece que tienen miedo. Si Caparrós hubiese determinado con frecuencia actos de ese tipo, los mismos pelotas que aplauden a Bielsa, hubiesen llamado demagogo a Jokin.
Lo que está claro es que por mucho que quieran disimularlo nos hemos quedado todos mermados en el aspecto psicológico tras la derrota en la final de la Europa League. Estábamos plenamente convencidos del triunfo y nos pasaron por la piedra. Y no me hablen de lo que pudo haber sido y no fue. Usted y yo también pudimos haber sido ricos si a nuestros padres les hubiese tocado la lotería cuando se casaron y nos hemos tenido que joder... con perdón ¡Derrota 3-0... que para algo hay un resultado porque las supuestas sensaciones no sirven para nada!
Y en cinco días afrontamos la Copa ante el Barca. Muchos nos dan por perdedores... pero al igual se la tienen que comer con el rico mojo picón y papas arrugadas de las Islas Canarias. Hay que jugar el partido y nunca se sabe. Como ganemos y saquemos La Gabarra... ¡menudo fiestón!... y si perdemos... ¡estaremos aún más orgullosos de ser un equipo único en la esfera terrestre y de ser lo más grande que hay en el mundo!
Sin embargo, eso no es óbice para señalar que si en la final de 2009 algunos le dieron leña a Caparrós (muy injustamente) porque al parecer le entró el miedo con el 1-0, obra de Toquero,... pues ahora que nuestro fútbol, según esas mismas voces entendidas, es de otra galaxia, hay que exigirle más al Athletic ante el poderosísimo Barcelona.
Espero haberme explicado con claridad. Seguramente no lo he conseguido. Lo lamento. Resumiendo y dejándome cosas por el camino si perdemos ante el Barca (lo fácil es verlo todo de color de rosas) me habré quedado con cierta desilusión reconociendo la buenísima trayectoria de Marcelo Bielsa en Bilbao y pidiendo el primero su continuidad porque sobre todo el choque frente al Atlético creía que era nuestro... SI O SI.
¡¡¡¡AUPA ATHLETIC HASTA EL INFINITO!!!!
Totalmente de acuerdo... parece que criticar a Bielsa es anatema. Se crititca cuando hay que criticar y se alaba cuando hay que alabar. Este año se han hecho grandes cosas, y la mano de Bielsa es inegable, pero ha habído fallos como la ida ante el Sporting en Portugal o en la final frente al atlético.
ResponderEliminarAhora frente a la final de copa prende el desánimo y parece que vamos como víctima propiciatoria, el partido hay que jugarlo, es difícil... si por supuesto, pero no imposible. Si se hacen las cosas bien se aplaudirá y si se hacen mal se criticará, esto es así y a nadie le puede llevar a rasgarse las vestiduras...
Estoy de acuerdo en algunos de los aspectos, sin embargome gustaría rebatir otras.
ResponderEliminarEn primer lugar, la final de la Europa League. Yo esperaba que el Athletic perdiese, no cómo se perdió, pero que perdiese; y así fue. El porqué es porqué (por desgacia y así fue) me esperaba que la final les fuera grande a los chavales, no supieron gestionar los tiempos del partido y cayeron ellos mismos en jugar a lo que el Atlético quería que jugaran (cabe destacar que la pelota es inicialmente del Athletic y se empieza a rechazar al pase en corto de toda la temporada para sortearla delante en largo).
Criticar a Bielsa; me parece comprensible pero injusto. Comprensible porqué cuando un equipo pierde se mira al banquillo, pero la final de la EL me pareció un derrota del mismo equipo que derrotó al Manchester United. Y me baso en el olvido del juego que les había llevado hasta allí y la pérdida de paciencia que les caracterizó a lo largo del partido. Menos 5 mn de intentar combinar, el resto fue un puro desastre, errores de pases a 2 m. que no tienen su origen de error en el banquillo, si no la cabeza de uno mismo.
Imaginar (cómo se hizo continuamente y se sigue haciendo ahora respecto a final de la Copa del Rey, aunque con menos entusiasmo) que el Athletic ganaría la final SI o SI me parecía de una miopía extrema viendo los partidos que el Atlético de Simeone estaba firmando.
En este aspecto, y eso ya es a modo personal, creo que nos falta un poco de prudencia, no ser cobardes, ser más prudentes.
La final de la Copa del Rey puede ser de mejor resultado final porque el FCBarcelona es un equipo al que le gusta jugar y para llegar a hacer eso, se debe abrir, no como el Atlético, que jugó con Falcao de MCD más de 30 min.
Sin embargo, para ganar al FCB,no hay otra que estar más concentrado que nunca, y obviar despistes que se dieron en Bucarest, despistes que, a mi modo de ver, destrozaron al Athletic y a su sueño europeo.
Aupa Athletic.
Totalmente de acuerdo. Es más, no es sólo lo que ocurrió en la final lo criticable. El Athletic ha sido un equipo sin completar, con muchas carencias defensivas (y no por los jugadores, Javi Martínez y Amorebieta han hecho un año espectacular) y con poca consistencia.
ResponderEliminarHemos tenido partidos en los que hemos podido ganar de sobra y hemos perdido en los últimos minutos, lo que demuestra que somos un equipo con poco oficio. En definitiva, blandos.
A eso hay que unir, como bien decís, el malísimo planteamiento en la final de Bucarest y el lamentable estado físico en el que los jugadores han llegado a final de temporada. Han llegado muertos a lo mejor (y cuando estábamos a las puertas de la final y el Athletic sólo tenía un 10% de posibilidades de clasificarse para la Champions, hemos seguido jugando con los mismo, incluyendo a Herrera y su pubalgia).
Así que, aunque reconozco que he disfrutado (y lo que me queda) este año con mi Athletic, no hay que darle al César lo que es del César, pero hay que ser valientes para decir las cosas como son. Bielsa en un poco 'iluminado', a lo Valdano. ¿Qué le vamos a hacer?