EL ATHLETIC "NO FUNKA"

 

 

Sí, "el Athletic no funka" se decía en mi pueblo, el Puerto de la Cruz, cuando te disponías a arrancar el coche y "se negaba a moverse"... se ponía remolón para ser más exactos.

Pues creo que algo similar le sucede a nuestro bendito Athletic. "No funka". La liga avanza y nos estamos dejando por el camino puntos decisivos. Los dos últimos ante un Deportivo de La Coruña que sin hacer nada del otro jueves arrancó un valioso empate en La Catedral. Nosotros, mereciéndo, mereciéndo, mereciéndo... y mereciéndo hasta el infinito según Marcelo Bielsa no supimos ganar un partido que era ganable a todas luces. Es más, encajamos otro gol de patio de colegio. En apenas siete u ocho metros hay una jugada rarísima donde nos quedamos mirando al adversario y en la misma línea de gol nos enchufan un bolichito de risa. Lo cierto es que tenemos una flojera defensiva de las que hacen época y hasta el Once Piratas -- equipo portuense entrañable que presidía Don Gregorio Alvarez Carballo q.e.p.d. gran aficionado al Athletic -- nos metería un gol seguro.

No se trata de ser alarmista o pesimista, más bien todo lo contrario, realista. Me parece que los aficionados rojiblancos -- no sé si todos, una gran parte... o una minoría -- tenemos un poco de miedo a lo que pueda deparar esta temporada. Hemos entrado en una espiral muy negativa y este sábado visitamos el Nou Camp, estadio que precisamente no invita al optimismo para iniciar la remontada. Aquel amigo que ponga un dos en la quiniela y se produzca ese resultado ganará muchos millones porque lo lógico es que nos metan un carro. Y lamento decirlo, pero si digo lo contrario miento. Si en la antesala del choque en el Bernabéu afirmé que había que rezar infinitos padres nuestros, ave maría... e incluso un credo para pensar en un triunfo, en la previa del Nou Camp hay que rezar infinito por infinito por infinito por infinito... si queremos soñar con los tres puntos.

Y en lo referente a Fernando Llorente da la sensación de que algunos están más pendientes de que marque un gol, dos, tres, cuatro... o veinte mil, en lugar de ocuparse de lo que verdaderamente importa, es decir, de que gane nuestro Athletic. Allá cada uno con sus opiniones.

¿Qué será de nosotros? Pues lo veo chungo, aunque ya sé que dos buenos resultados cambian una situación negativa de cabo a rabo. Lo que si tengo más claro que el agua es que... ¡¡Dios sólo creó un equipo único, el Athletic!!